Nicolás Maduro, ¿en el ocaso?
Pese al repudio de la mayoría de los venezolanos que participaron en el proceso electoral del 28 de julio pasado, Nicolás Maduro habrá de gobernar un tercer periodo siguiendo así los pasos de su mentor Hugo Chávez en lo que amenaza con convertirse en una nueva dictadura latinoamericana como la que hoy se vive en Cuba y Nicaragua cuyos mandatarios, por cierto, fueron los únicos Jefes de Estado presentes en lo que muchos calificaron como una “farsa”.
Los últimos cinco meses han sido un periodo oscuro para la oposición, la cual ha visto como Edmundo González, quien se habría elevado con la victoria, ha sido sistemáticamente perseguido por el Estado. Desde entonces, sin importar edad, han sido arrestadas dos mil personas en acciones que culminaron con la detención de María Corina Machado, lideresa de la oposición, quien más tarde, ante la presión internacional (incluido el propio Donald Trump), fue liberada.
Frente a la crisis que vive el país en todos los ámbitos y la falta de oportunidades, Maduro ha ido perdiendo el ímpetu que lo acompañó inicialmente, por lo que se ha refugiado en unas fuerzas de seguridad que hoy lo apoyan, pero que en cualquier momento pudieran voltearle el rostro como históricamente ha ocurrido en esa nación.
Maduro asume la presidencia de manera espuria. Sistemáticamente se negó a presentar las actas que presuntamente validaban su triunfo amparándose en un órgano electoral abiertamente chavista. El pecado acusa, dirían las abuelas, Maduro adelantó la hora de la ceremonia de la toma posesión; tuvo lugar en un salón cerrado de la Asamblea Nacional; ordenó en la zona el despliegue de un sistema de misiles y se cerraron las fronteras con Colombia, todo esto frente a la posibilidad de que Edmundo González ingresara al país a amargarle la fiesta.
Estados Unidos no está conforme con lo que está ocurriendo. El Departamento de Estado elevó de 15 a 25 millones de dólares la recompensa por la captura del flamante presidente venezolano, al igual que su ministro del interior, Diosdado Cabello, ambos acusados de tráfico de drogas en complicidad con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), paradójicamente horas antes el gobierno venezolano había emitido fichas de búsqueda contra los expresidentes de México Felipe Calderón y Vicente Fox, acusándolos de invasores, luego de que se habían ofrecido a escoltar a Edmundo González.
A la distancia, en México, la presidenta Claudia Sheinbaum mantiene una posición de imparcialidad, una imparcialidad que con el envío de un representante al acto de toma de posesión se parece más a una legitimación.
Los Ángeles: un recordatorio de los efectos del cambio climático
Una verdadera tragedia es la que está viviendo el condado de Los Ángeles, el más poblado de la Unión Americana, tras los incontrolables incendios desatados hace ya casi una semana. Son escenas apocalípticas; miles de residentes de las zonas afectadas son evacuados, al tiempo que se muestran zonas residenciales completamente arrasadas.
Pese a ser un fenómeno recurrente preocupa que paulatinamente, estos incendios hayan ido incrementando su poder devastador, producto en gran medida de los efectos de un cambio climático que al paso del tiempo se va volviendo incontrolable y, aunque aún no se conocen las causas exactas de cómo iniciaron los fuegos, sí se vislumbran los elementos que facilitaron su diseminación: las lluvias torrenciales del año pasado propiciaron un crecimiento excesivo en la vegetación, lo que aunado a una prolongada sequía ofreció un material propicio para la alimentar las llamas.
De acuerdo al departamento de bomberos del condado, tres son los factores que detonan este tipo de eventos: incendios accidentales provocados por acciones negligentes o mal intencionadas; daños en la infraestructura eléctrica que derivan la mayoría de las veces en chispas; o truenos, relámpagos y tormentas eléctricas; más allá de los orígenes que ciertamente son muy útiles en la elaboración de mapas de prevención, una vez desatado el fuego la logística se vuelve más complicada, con la participación de todos los servicios de emergencia encabezado por el cuerpo de bomberos, activos los hospitales y en alerta prácticamente todas las autoridades.
En este momento los daños son incuantificables. Hasta ahora se registran diez muertos, sin embargo, de acuerdo al departamento de Medicina Forense de Los Ángeles, esta cifra podría elevarse considerablemente una vez sofocado el fuego. Se registran cinco focos principales siendo los más importantes Paliseades e Eaton en donde en conjunto se han consumido más de 14 hectáreas de bosques y aún están muy lejos de ser controlados.
Más allá de las afectaciones económicas, que son muchas, los incendios tienen impactos de más largo alcance alterando los ecosistemas, eliminando flora y fauna, afectando así la biodiversidad de la región, sumado, por supuesto, a los efectos tóxicos provocados por la contaminación del aire.
Es un hecho que los incendios forestales y el calentamiento global están íntimamente conectados en un ciclo destructivo. A medida que las temperaturas en el orbe se incrementan la frecuencia, intensidad y duración de los incendios crece lo que genera una peligrosa espiral de retroalimentación. Paralelamente los incendios contribuyen al calentamiento global al liberar grandes cantidades de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero lo que acelera el cambio climático.
Podrá sonar baladí, pero es ineludible que llegó el momento de transitar hacia el uso de energías limpias, es un imperativo proteger nuestro ecosistema y aprender a convivir en armonía con nuestro entorno lejos de verlo como una fuente de explotación. De no hacerlo eventos como el que hoy consume a Los Ángeles dejarán de ser fenómenos naturales, para convertirse en un recordatorio de nuestra incapacidad para cuidar lo que nos reste de mundo.
¿Habrá dinero para el Plan México?
Este lunes se da a conocer en Palacio Nacional el llamado Plan México, que es la Estrategia Nacional de Industrialización y Prosperidad Compartida, a cargo de la Secretaría de Economía. La presentación correrá a cargo de Marcelo Ebrard, quien públicamente a últimas fechas ha estado más en papel de canciller, respondiendo a las ocurrencias de Donald Trump, y hasta de policía, incautando mercancía apócrifa o de contrabando, que desarrollando políticas económicas.
El Plan México incluye incentivos para la inversión privada, desarrollo de obra pública y privada, y formación de capital humano. Según Altagracia Gómez, el plan tuvo una recepción increíble, muy bien aceptada y bien recibida, por parte de los empresarios integrantes del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización (CADERR) -el cual coordina la también empresaria-, a quienes la presidenta Claudia Sheinbaum les dio un adelanto el pasado jueves.
En octubre pasado, antes de las elecciones en Estados Unidos, hubo un anuncio de inversiones por 20 mil millones de dólares de empresarios nacionales y estadounidenses. El anuncio podrá mantenerse, pero en los hechos la cifra seguramente variará, pues la mayoría de las inversiones estarán pausadas o en retirada luego del triunfo de Trump y sus amenazas arancelarias.
En cuanto a inversión de infraestructura, por lo que toca a la inversión pública, hay una disminución este año de 2.7% respecto a 2024, lo cual podría atribuirse al arranque del sexenio y la etapa de planeación. Ya se verá en 2026 si aumenta el monto e, importante, si hay dinero para ello, no sólo en el siguiente año, sino desde este 2025.
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